En un acto de celos, José Luis Miranda, de 35 años, atacó a su ex pareja y a sus dos hijos menores, de 4 y 9 años, en un incidente que tuvo lugar en Villa Don Pablo, Rawson. Este suceso ocurrió el miércoles 22 de noviembre, aproximadamente a las 3 de la mañana, cuando Miranda, bajo la sospecha de infidelidad, confrontó a su ex pareja, Julieta Herrera, de 32 años.
Miranda había informado a Herrera sobre un posible viaje de trabajo a Jachal, que lo ausentaría por un mes. Quería discutir asuntos financieros y de cuidado de sus hijos. Esa noche, después de llevar a sus hijos a comer helado, Miranda tuvo una conversación con Herrera, advirtiéndole que no permitiera la entrada de otros hombres a la casa. Al intentar Herrera llamar a la policía, Miranda, enfurecido, sacó un arma y amenazó con matar a todos en la casa.
La situación escaló rápidamente cuando Miranda exigió a Herrera escribir una lista de hombres con los que había estado. Al intentar huir, Miranda abrió fuego. Según reportes, Miranda consumía drogas y, tras el ataque, se disparó a sí mismo en la cabeza, aunque sobrevivió.
El niño de 9 años, M.B.M.H, es quien se encuentra en la situación más crítica, con una bala alojada en la cabeza y pérdida de masa encefálica. Fue operado de urgencia y se le colocará un catéter intracraneal. Su hermano de 4 años, S.M.H, está en condición estable tras recibir un disparo en el pecho y podría ser dado de alta pronto. La madre también sobrevivió a pesar de ser herida en la cabeza.
El fiscal del caso, Eduardo Martínez, señaló que es la primera vez que un caso de esta gravedad llega a la UFI CAVIG. La víctima había presentado una denuncia previa contra Miranda por violencia de género, solicitando una orden de restricción. Miranda no tenía antecedentes y fue visto bebiendo alcohol la noche anterior al ataque. El arma fue encontrada en la escena del crimen.