Durante un partido entre Independiente y Santa Ana en la Liga de Fútbol de Chajarí, un suceso impactante cambió la vida del mediocampista Martín Wallingre. En un enfrentamiento con otro jugador, este último, enfurecido, le dio un puñetazo en su zona genital. A raíz de la lesión, Wallingre fue operado de emergencia, resultando en la extirpación de uno de sus testículos.
Wallingre, de 33 años, contó en una entrevista que el incidente ocurrió después de una jugada polémica en el área. Según él, quitó la pelota limpiamente al oponente, pero este reclamó un penal. Al protestarle, el jugador contrario se levantó y lo golpeó en los genitales. La agresión fue capturada por las cámaras de seguridad del estadio, pero el árbitro no la vio, por lo que no se expulsó al agresor. Wallingre continuó jugando pese al dolor, pero al día siguiente, la intensidad del malestar lo llevó a consultar a un urólogo.
Luego de realizarse estudios, se confirmó que el golpe había causado daños internos graves en el testículo, lo que requirió una intervención quirúrgica. Post-operación, el urólogo informó a Wallingre sobre la necesidad de extirpar el testículo afectado.
Wallingre expresó que se encuentra recuperándose, pero lamenta que el jugador que lo lesionó, identificado como Alexander Lencina, no haya buscado disculparse. En una reunión reciente de la Liga de Fútbol de Chajarí, la directiva de Independiente señaló que la lesión fue producto de una acción antideportiva de Lencina, superando lo esperado en un encuentro deportivo. El presidente de la Liga, Juan Antonio Brarda, informó que tomarán medidas disciplinarias contra Lencina y que, de manera preventiva, se le ha suspendido por un partido mientras se investiga el incidente.
