Charlotte Caniggia, la conocida figura mediática, se encuentra en el centro de atención tras ser citada a declarar en relación al impactante caso del empresario Fernando Pérez Algaba, quien fue trágicamente desmembrado en Ingeniero Budge a finales de julio. La convocatoria surge después de que Mariano Horacio Córdoba, oficial de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, mencionara a Caniggia en su declaración.
A pesar de la mención, el representante legal de Charlotte ha negado categóricamente cualquier relación entre su clienta y el empresario fallecido. La hija del exfutbolista Claudio Paul Caniggia fue citada para presentarse en la sede de la SubDelegación Departamental de Investigaciones (SubDDI) de Esteban Echeverría.
La razón detrás de esta citación se debe a las solicitudes de la familia de Pérez Algaba, quienes buscan esclarecer el tipo de relación o vínculo que Charlotte pudo haber tenido con la víctima. Según el comisario, Charlotte habría facilitado un departamento para que Fernando realizara ciertas operaciones, aunque la naturaleza exacta de estas operaciones sigue siendo objeto de especulación.
Adicionalmente, Córdoba mencionó que conoció a “Lechuga”, como se le conocía a Fernando, hace aproximadamente dos años y que su relación se basó inicialmente en inversiones en criptomonedas. También se refirió a una lujosa oficina que Fernando había establecido, indicando que Charlotte Caniggia podría haberla prestado al empresario. Sin embargo, esta afirmación fue refutada por el abogado de Charlotte.
En medio de este torbellino de acusaciones y especulaciones, una foto de Charlotte, su novio y el empresario se volvió viral. Aunque algunos sugieren que la foto podría indicar una relación cercana, otros creen que simplemente pudo haber sido una coincidencia o una foto oportunista.
Con la atención mediática centrada en Charlotte, muchos se preguntan si esto es simplemente una distracción o si hay verdades más profundas que aún no han salido a la luz. Lo que es seguro es que el caso continúa generando titulares y manteniendo a la opinión pública en vilo.