El individuo se encuentra en fuga. Un familiar lo reportó como desaparecido y, al llegar la policía a su hogar, descubrieron un cadáver en avanzado estado de descomposición. Aún no se ha determinado la identidad de la persona fallecida.
El descubrimiento tuvo lugar el pasado viernes en el barrio San Pedro. La policía, al investigar la desaparición de un hombre, se dirigió a su vivienda. Al abrir el refrigerador, encontraron un escenario perturbador: el cuerpo de una mujer, atado con cables y cubierto con una manta.
Aún se desconoce quién es la víctima, pero se ha solicitado una autopsia para determinar su identidad y la causa de su muerte. La escena se ha mantenido intacta para recoger evidencia, como huellas dactilares, que puedan ayudar a identificar al culpable.
El principal sospechoso es un individuo de 41 años, Nelson Osvaldo W., quien reside en el barrio San Pedro. Según relatos de un familiar, Nelson había mencionado que se dirigía a un hospital en Posadas para un tratamiento médico. Tras no poder contactarlo repetidamente, este familiar decidió alertar a las autoridades.
El mismo familiar también compartió que, al acercarse a la casa de Nelson, percibió un olor desagradable. Por ello, la policía decidió ingresar a la vivienda, esperando encontrar a Nelson, pero se toparon con un hallazgo aún más perturbador.
Al inspeccionar la casa, los oficiales abrieron el refrigerador y encontraron un bulto grande envuelto en una manta y atado con un cable. Al desatarlo, se dieron cuenta de que se trataba del cuerpo de una mujer en estado de descomposición.
La investigación está en manos de la fiscal Mariela Grün, quien ha solicitado la colaboración de expertos forenses. Se han recogido testimonios de vecinos y familiares para esclarecer el caso.