Georgina Rodríguez y Cristiano Ronaldo son conocidos no solo por sus carreras profesionales y su vida amorosa, sino también por sus impresionantes físicos. Ambos siguen una dieta específica para mantener sus cuerpos en forma, conocida como el Método CR7. Esta dieta se centra en comidas saludables y variadas, con un mayor énfasis en vegetales que en carnes, además de incluir fibras y grasas saludables. También se aseguran de consumir mucha agua y tienen una rigurosa rutina de entrenamientos.
La dieta diaria del Método CR7 consiste en seis comidas. Por la mañana, Georgina suele desayunar una tortilla francesa acompañada de café con leche y jugo de naranja. A media mañana, después de su sesión de entrenamiento, opta por una banana. Por la tarde, merienda berberechos al limón. Tanto en el almuerzo como en la cena, eligen comidas saludables que, nuevamente, priorizan los vegetales sobre la carne. A pesar de seguir una dieta estricta, ocasionalmente se permiten ciertos antojos, como una hamburguesa y un postre rico en calorías.
La pareja se conoció en 2016, cuando Georgina trabajaba en una tienda Gucci en Madrid y Cristiano jugaba para el Real Madrid. Desde entonces, han compartido muchos momentos juntos, incluido el nacimiento de su hija Alana Martina en 2017.
Además de su dieta, Georgina ha mencionado en su docu-serie de Netflix que, aunque ambos tienen una genética envidiable, es su compromiso con la dieta y el ejercicio lo que les permite mantener sus figuras. Sin embargo, desde que Cristiano se unió al Al-Nassr en Arabia Saudita, Georgina ha tenido que renunciar a su comida favorita, la secallona, un embutido de carne magra de cerdo típico de la cocina catalana, ya que el consumo de carne de cerdo está prohibido en ese país.
Finalmente, es importante mencionar que, además de su vida personal y su dieta, Georgina ha logrado establecerse como una influencer y empresaria exitosa, con una serie en Netflix y una gran base de seguidores en redes sociales.