Las agrupaciones piqueteras intensifican acciones callejeras en reclamo de mayores provisiones para comedores y merenderos. En un contexto post-electoral, el gobierno enfrenta críticas por su gestión social.
Tras el desenlace de las elecciones PASO, en las que destacaron figuras como Javier Milei y Patricia Bullrich, se han exacerbado tensiones sociales en Buenos Aires. El Polo Obrero, agrupación que no tuvo el respaldo esperado en las urnas, ha decidido encabezar manifestaciones en puntos clave de la ciudad y sus alrededores.
Estas protestas, previstas incluso antes de los comicios, surgen en respuesta a una deficiencia en la entrega de alimentos esenciales para comedores y merenderos. Eduardo Belliboni, vocero del Polo Obrero, denuncia irregularidades y señala que muchas veces los insumos entregados no cubren las necesidades básicas de los beneficiarios.
Algunos análisis internos sugieren que, ante la falta de apoyo gubernamental en asuntos de alimentación básica, la población ha dirigido su voto hacia opciones menos tradicionales, buscando un cambio. Así, la izquierda reconoce no haber canalizado adecuadamente el descontento ciudadano.
Dentro de las críticas al gobierno de Alberto Fernández, se destaca la intermitente entrega de provisiones a los comedores populares. Belliboni insiste en que muchos comedores pasaron meses sin recibir asistencia alimentaria, situación que agrava el descontento social y que se reflejó en los resultados electorales, particularmente en zonas marginadas.
Con la economía nacional tambaleante, caracterizada por la devaluación del peso y el alza inflacionaria, los reclamos no se limitan a la alimentación. Las agrupaciones piqueteras buscan mejoras en los montos de los planes sociales, argumentando que los ingresos actuales son insuficientes ante el alza constante de los precios.
El viernes se espera una jornada de intensa movilización con cortes en puntos neurálgicos, como la Autopista del Oeste y el Puente Pueyrredón. Esta acción, según fuentes internas, es solo el comienzo de una serie de protestas organizadas por el Frente de Lucha Piquetero.
Belliboni concluye enfatizando que el auge de figuras políticas derechistas, como Milei, es consecuencia directa de políticas gubernamentales que, según su percepción, han ajustado recursos incluso a los sectores más vulnerables.