Luis Rubiales, quien era el presidente de la Federación Real Española de Fútbol (RFEF), anunció su decisión de dejar el cargo. Esta decisión se tomó luego del incidente en el que besó a la jugadora Jenni Hermoso sin su consentimiento durante la premiación al equipo femenino que se consagró campeón del mundo en Nueva Zelanda-Australia 2023.
Rubiales comunicó su renuncia a través de un documento que compartió en redes sociales. En este, mencionó: “He transmitido mi renuncia al cargo de presidente de la RFEF. Tras la rápida suspensión hecha por FIFA y otros procedimientos abiertos contra mí, es claro que no podré regresar a mi puesto”.
Además, Rubiales destacó que no quería que su permanencia afectara de manera negativa a la Federación o al fútbol español. También señaló que su decisión busca contribuir a la estabilidad y al sueño de 2030, que tiene como objetivo traer al país el evento futbolístico más grande del mundo.
Por otro lado, el ex presidente de la RFEF enfrentaba una suspensión de 90 días impuesta por la FIFA y confirmó que también dejaría su puesto en la vicepresidencia de la UEFA.
A pesar de su renuncia, Rubiales seguirá defendiéndose del hecho que causó rechazo en muchos. Expresó su confianza en la verdad y su intención de hacer todo lo posible para que esta prevalezca. También mencionó el apoyo y el sufrimiento de su familia y seres queridos debido a la situación.